Ventanas de PVC o aluminio, ¿cuáles son mejores?

Poner la calefacción, en invierno; o el aire acondicionado, en verano, y notar cómo el calor o el frío se escapa por no tener unas buenas ventanas es frustrante y, sobre todo, caro. Porque en estos tiempos en los que la energía está a precios tan elevados, debemos poner el foco más que nunca en la conservación de la temperatura en nuestras viviendas.

¿Y cómo se alcanza ese objetivo? Joseba Asensio, gerente de Ventas Euskalum, lo tiene muy claro: «Se consigue a través de las ventanas porque una buena ventana es aquella que cierra bien, aísla bien y no deja escapar el calor en invierno ni el frío en verano», declara este profesional de la firma donostiarra de ventanas, quien da respuesta a la «reina de las preguntas» en este sector: ¿Mejor aluminio o PVC?

Asensio considera que «el aluminio nos permite una mayor durabilidad y es un material que permite hacer ventanas tanto de grandes dimensiones como muy pequeñas. Se adapta muy bien a cualquier necesidad que pueda surgir en nuestra vivienda». Además, hay que tener en cuenta que en el caso del aluminio es imprescindible la rotura de puente térmico, mediante la separación de la cara interior de la exterior por medio de poliamidas. Otra de las ventajas del aluminio es que dispone de infinidad de acabados, pero hay que tener también en cuenta que son necesarias grandes secciones para lograr un aislamiento excelente.

En lo que a PVC se refiere, la ventana de PVC «nos permite un muy buen aislamiento térmico con diferentes acabados, el mismo tipo de herraje, siempre con multipunto de cierre y con materiales que nos permiten poner hasta tres cristales con aislamiento natural», apunta el propio Joseba Asensio. Así, una de las ventajas del PVC es que ganamos un aislamiento excelente partiendo de ventanas de sección estándar y aumentando las prestaciones con la serie elegida para sus necesidades. Además, existe una gran variedad de acabados y texturas de imitación.

En Ventanas Euskalum añaden otros dos factores diferenciales a la hora de lograr el resultado perfecto: la maquinaria empleada para su fabricación y el gusto por las cosas bien hechas. «Nosotros nos surtimos de los mejores proveedores y constructores de ventanas para tener la certeza de que se cumplen los estándares de calidad que nuestros clientes exigen», señala Asensio.

El gerente de Euskalum, cuya tienda podemos encontrar en la calle Felipe IV del donostiarra barrio de Amara, nos habla también de los herrajes: «Siempre proponemos el herraje oscilobatiente de serie, aunque en el caso de las ventanas de PVC es siempre con multipunto de cierre y con materiales que nos permiten poner hasta tres cristales con aislamiento natural». Además, nunca falta la microventilación, «que nos permite una pequeña ventilación de cada estancia para renovar el aire de la misma. Un cierre perfecto, ajustado, con multitud de reglajes».

Por último, no podemos olvidar que «la ventana siempre debe ir acompañada de un buen vidrio, de valores térmicos adecuados para lo que necesitemos».