La cita con New York y Terranova

Muchos beasaindarras relacionan a Ignacio Arizmendi con el mundo hostelero, pero de un tiempo a esta parte, son más los que le señalan como uno de los organizadores de la aventura-expedición 'Tras la huella de los balleneros vascos'. Quienes deseen conocer a este beasaindarra, a su vida en New York desde hace tres décadas o los planes que alberga para surcar los mares del Norte, no tiene más que acudir mañana viernes, a las 19.00 horas, al Palacio de Igartza. Es el tercer viernes del Azaroa Zientziaroa, y Lemniskata, organizador del ciclo, trae al estrado del patio del palacio de Igartza a este beasaindarra internacional, que preside dos empresas: Wings Air Helicopters y 5A Incentive Planners.

De la hostelería a los barcos

A Ignacio Arizmendi se le puede aplicar a la perfección ese popular tópico de ser cocinero antes que fraile, ya que hace décadas (en 1985) se graduó en la escuela superior de hostelería y turismo de Madrid. Con una oferta de trabajo cruzó el charco y se plantó en México, y cinco años después se trasladó a Nueva York. Es director y propietario de varias empresas de turismo y aviación. Con 5A Incentive Planners, investiga y descubre lugares especiales de Estados Unidos. Tiene una escuela para aprender a volar helicópteros. También realiza vuelos privados para productores de cine sobre Nueva York.

Precisamente en una avioneta fue de Nueva York a Red Bay para sobrevolar los lugares en donde faenaban los balleneros vascos del siglo XVI. Este viaje fue lo que le empujó a poner en marcha el proyecto de una expedición por esa ruta marítima cumpliendo un sueño, el de surcar las gélidas aguas de los mares del Norte, 'Tras las huellas de los balleneros vascos', aventura que desgranará en la conferencia que ofrezca mañana, en la que participan varios investigadores.

Se prevé que el barco salga en junio de 2017 desde St John's, capital de Terranova.

De todo esto, y en definitiva de las muchas facetas que van jalonando su vida profesional, hablará mañana, a partir de las 1900 horas, en el patio del palacio de Igartza.

La entrada es libre y gratuita, la cita merece la pena.