La antigua fábrica de detergentes Bilore en Zaldibia pasa a mejor historia

Ha comenzado la transformación de la fisonomía de Zaldibia, en concreto de su entrada. Allí, sobre una inmensa parcela de 23.000 m2 permanecían a duras penas en pie una veintena de pabellones y edificios, un complejo en ruinas que en su día fue una pujante factoría de la que salían aquellos tambores de detergente con los que se lavaba la ropa, junto a otros jabones o artículos de limpieza. Hace tres lustros que la fábrica Bilore cerró sus puertas, pero su huella ha permanecido a la entrada del municipio goierritarra en forma de una enorme fábrica que ha padecido un evidente deterioro y que en 2013 sufrió incluso un importante derrumbe. Una imagen que desparecerá para siempre tras el arranque de las obras de demolición

La finca fue adjudicada mediante una subasta electrónica en primavera de 2018 a Excavaciones Mugertza. El año pasado recibió la licencia de demolición, y tras los trabajos previos, se está procediendo a derribar estos edificios que forman parte de la memoria colectiva de Zaldibia.

El desmantelamiento de Bilore lleva aparejados trabajos de descontaminación, una de las principales preocupaciones del consistorio goierritarra. La presencia en sus instalaciones de agentes contaminantes y químicos ha sido una amenaza para el no muy lejano río Oria.

La Asociación Vasca de Patrimonio Industrial y Obra Pública lamentó tras su adjudiciación «otra pérdida para la arquitectura industrial de la modernidad en Gipuzkoa» a pesar de algunas iniciativas para mantener y recuperar edificios como el almacén, que ha sido demolido.