Al Arrate no le dieron opciones

El Arrate cayó en casa ante el Valladolid en un apretado partido que, sin embargo, siempre estuvo decantado del lado pucelano. La derrota con el Cuatro Rayas Valladolid cierra hasta la segunda vuelta el capítulo de los enfrentamientos con los intocables de la categoría.

En la cancha de Ipurua prevaleció la lógica, al manifestarse una clara superioridad del conjunto pucelano frente a un Arrate que mostró sus dos caras. Una triste y titubeante durante el primer periodo -sirva como referencia que empleó once minutos para estrenar su casillero después de haber encajado media docena de goles- y una segunda combativa, acertada e ilusionante en el segundo periodo, que puso de manifiesto el verdadero potencial y calidad que atesora este nuevo grupo humano.

La derrota del Arrate fue acompañada de buenos resultados de su competencia por la salvación. Al margen de tener que mantenerse otra jornada en puestos de descenso, su predecesor, Puerto Sagunto, le supera en un punto gracias a su empate en Alcobendas. Al menos, el colista Toledo sigue sin poder estrenarse tras dar su brazo a torcer ante el Torrevieja.

El Valladolid empezó el partido con mano de hierro y no bajó sus prestaciones pese a lo exiguo de la victoria. El 0-6 inicial fue una primera señal de la plena confirmación de sus propósitos que se materializaron con el contundente 8-16 del descanso.

Esta holgada ventaja permitió a Pastor mover el banquillo como tenía previsto durante una segunda mitad en la que se pudo comprobar la recuperación de un Arrate, que tras el pequeño parón de una semana, saltará a Ipurua con el fin de batir al colista Toledo. Aquí debe empezar la remontada.