Imágenes llenas de adrenalina

Axi Muniain sacrificó ayer su dosis diaria de surf para que el subidón de hoy sea aún mayor. Con esa esperanza viajó durante toda la jornada en su camión-vivienda desde Galicia hasta casa. El zarauztarra estaba disfrutando desde el lunes de la furia del mar en la abrupta costa gallega pero los técnicos de AZTI-Tecnalia o, ¿quizás el destino?, le aconsejaron sumarse a la causa de la carretera y manta en aras de un bien superior.

Las previsiones meteorológicas especulaban con convertir el 5 de febrero de 2011 en un día histórico. Axi Muniain se desplazará hoy con su equipo hasta Agiti o Belharra, dos de los grandes anzuelos para los riders más salvajes. El primero, un enclave rocoso entre Orio y Donostia. El segundo, un paraíso XXL entre Hendaya y Ciboure.

Incluirá estos escenarios en su proyecto Naturgas Big Wave 2011 que patrocina BAT Basque Team y que consiste en documentar la ola más grande del invierno europeo para optar a los premios XXL Big Wave Awards de California. Nadie hasta el momento ha conseguido ganar un galardón en los Oscar de la modalidad extrema del surf con una producción europea.

Axi llegará, eso sí, «echo polvo», confesaba ayer desde la autopista. La semana pasada desafiaba a los helados Irish slabs de la costa oeste irlandesa. Desde allí las previsiones le arrastraron en un Ferry hasta el norte de Francia, el camión-vivienda hacia una corta escala en Galicia y, por fin, ya está en casa.

El rider guipuzcoano reconocía ayer que «las últimas semanas han sido una locura y no he tenido margen para descansar. Además hemos tenido algún problema mecánico tanto con el camión como con las motos acuáticas y no sido nada fácil coordinar las sesiones. Nos hemos encontrado con una ola espectacular y la pena es que nos quedamos cortos de imágenes para lo que podíamos haber obtenido. Hemos abortado alguna que otra sesión».

Con el apoyo de su hermano

A pesar de contar con ocho nominaciones a los premios XXL Big Wave Awards y una larga experiencia en olas gigantes, Axi no ha perdido ni el respeto ni la capacidad de admiración ante paredes de agua salada. «Sigo tragando agua y la verdad es que en esta última salida me he encontrado con una ola hasta demasiado agresiva. Las imágenes no reflejan el verdadero peligro que hemos corrido».

De su periplo gallego relata, por ejemplo, que «nos hemos encontrado unas condiciones impresionantes en una zona donde quedaba al descubierto una roca que te encontrabas en medio en el mejor momento de la ola».

Destaca la valentía y el saber hacer de su hermano, Igor, «que conducía la moto y ha sido tragado por enormes columnas de siete metros sabiendo salir airoso». Uno, el mayor, con los colores de O'Neill y el otro, con los de Quiksilver, pero ambos con el sello Muniain.

Felip Verger, coordinador del proyecto y manager de Axi, cree que «está tomando muchos riesgos y se la ha jugado en más de una ocasión. Le motiva pasárselo bien, no el optar a unos premios. En uno de los intentos irlandeses una gran ola le llevó hasta el fondo del mar, chochó contra el suelo y rompió la cámara que llevaba. Para que la gente se haga una idea».

Con tono didáctico cuenta Axi en uno de sus vídeos cómo «los Irish slabs nos han dejado olas agresivas, de las que se anticipan a cualquier lectura, y todo con roca muy cerca más una gran corriente. Con socavones que provocan grandes turbulencias».

En cuanto al éxito del proyecto, Verger reconoce que «somos conscientes de que para triunfar en los XXL Big Wave Awards dependemos de que en California o Hawai tengan un mal invierno, pero lo que está haciendo tiene muchísimo valor». Con sinceridad asume que «con las imágenes de Galicia no iremos muy lejos pero hay algunas tomadas en Irlanda que son muy interesantes».

Tras descansar en casa, Axi esperará hoy a que «la marea esté baja», para deslizarse por las olas gigantes que se esperan en Agiti. «Hace años que no se dan las condiciones en la zona pero cuando se dan dejan un panorama espectacular para sacar buenas imágenes». De esas en las que se palpa la adrenalina.