«No hay varita mágica sino mucho trabajo»

Brazos y puños en alto, abrazos entre los dos txapeldunes y el aplauso general redondearon la explosión de júbilo cuando el presentador anunció a Iñaki Rodaballo como ganador.

- Iñaki Rodrigo 'Rodaballo' lo has conseguido por segunda vez y eres el único. ¿Muy feliz no?

- La verdad es que hemos trabajado en ello José Luis de la Haza y yo. Repetir triunfo, qué os voy a decir: estamos flotando. Es difícil llegar aquí. Hemos pasado tres cortes, cambian de jurado... Este concurso tiene su peso ahí, en varios días distintos. El pintxo que se traiga tiene que tener mucha calidad. Cada año es más difícil. Hay quien se queda fuera y yo les dedico a ellos el triunfo. Que sigan trabajando con ilusión.

- Descríbanos el pintxo.

- Se llama 'Chips y ron'. Lo presentamos en una copita y se toma con una cucharilla en dos o tres bocados. Lleva unas lágrimas de ron, una espuma de patata, un chipirón plancheado, unas chips de yuca y boniato con una sal de chipirón y cebolla y unos twister de limón. Se come de abajo a arriba. El conjunto de texturas y matices parece que ha gustado.

- ¿Cuánto les llevó inventarlo?

- No es el tiempo que te lleve sino el trabajo del día a día. Sale trabajando mucho. No tenemos una varita mágica para decir que se me ha ocurrido esto. Trabajando vas limando el producto final. Esto es un premio al trabajo más que a una invención graciosa o artística.

- Se come en medio minuto pero ¿cuánto cuesta prepararlo?

- Teniendo la 'misse'n place', la mesa preparada con los ingredientes, minuto y medio. Siete nos ha costado tres minutos. Puedes vender cuatrocientos en la barra perfectamente. Está pensado para que la gente lo disfrute a un precio de tres euros.