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BALONMANO

El Bidasoa-Irun jugó un gran partido y rompió su mala racha

El triunfo en Zarautz devuelve a los irundarras a un puesto con premio. El Gijón,uno de los mejores equipos de la categoría pasará este sábado por Artaleku

I.A.

Miércoles, 13 de febrero 2013, 03:54

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El Bidasoa-Irun fue a Zarautz con reservas porque acumulaba cuatro derrotas consecutivas y se enfrentaba a un Amenabar siempre peligroso en su cancha y volvió con una victoria que, aparte de cortar la mencionada mala racha, le sirve para volver a encontrarse consigo mismo y a regresar a los puestos de play-off de ascenso.

Ganar en Zarautz podría sonar a obligatorio, pero las connotaciones de la cancha -con numeroso y entregado público- y del rival, siempre motivado ante la visita del Bidasoa, invitaban a ser prudentes.

El marcador estuvo igualado el primer cuarto de hora y en el segundo los irundarras cambiaron un 7-6 por el 12-19 del descanso. Defensa y contraataque, por un lado, y la eficacia de Renaud y Alvarez, por otro, espolearon a los irundarras. Los dos marcaron seis goles en el primer tiempo, sin fallo en el caso del gallego.

En la reanudación, el equipo local apretó en defensa y la renta de siete goles fue decreciendo paulatinamente. Zubiria consiguió que ese ritmo fuera el más bajo posible, pero en el último minuto el Zarautz empató a 28 y el Bidasoa-Irun tuvo que marcar para no perder un punto. Cuando lo hizo Gimeno tocó defender de nuevo para aguantar los dos. Al final, 28-29 y el equipo irundarra que vuelve a la zona interesante, aunque con Alcobendas y Teucro acechando a un punto. Actualmente, estos tres equipos pelean por el último billete para el play-off.

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Bolea, satisfecho

Tras el partido, Fernando Bolea apreció que «la clave estuvo en una primera parte espectacular, tanto en ataque, con Roberto y Leo metiendo goles y David dirigiendo muy bien, como en portería. Pero a la vuelta del descanso, aunque teníamos una buena renta y un jugador más, perdimos un par de balones y no me gustaba cómo estaba el equipo, demasiado parado».

Poco después, «un par de errores muy claros nuestros propiciaron contraataques del rival y el partido se nos puso muy cuesta arriba, sobre todo a partir de la exclusión de cuatro minutos de Asier Aranburu. Eso le dio alas al Zarautz y a nosotros nos entraron los temores. David Rincón se resintió de sus molestias en el muslo, lo sentamos y tuvimos que ir a un balonmano más directo, con el que no tenemos tanta fuerza. Nosotros necesitamos cocinar más las cosas».

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El maño recordaba que «mantuvimos el tipo con la defensa y con un Zubiria sensacionales. Al final fuimos capaces de jugar con tranquilidad y en la última jugada hicimos un movimiento muy bueno para liberar a Alexis, que metió el gol decisivo».

A pesar de la victoria, Bolea reconocía que «tenemos demasiada dependencia de Leo Renaud y cuando él nota eso, también se atasca. Es nuestro pilar ofensivo, pero al final todo el mundo lo sabe. Si consiguen pararlo o tiene un mal día, tenemos muchos problemas».

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Eso, en un lado de la balanza. En el otro, «la defensa y Zubiria estuvieron muy bien. Y Roberto fue una amenaza real. En la primera parte estuvo muy bien, hizo mucho daño y nos ayudó muchísimo al despegue».

Bolea asegura que «necesitábamos ganar. Ojalá hubiera sido con más comodidad, pero también sabe mejor cuando ha sido tan sufrido y tan trabajado. En líneas generales estoy satisfecho. Ya había comentado que el equipo estaba trabajando bien y ahí está el resultado».

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Punto de inflexión

La última victoria se remontaba al 24 de noviembre y desde entonces se habían sucedido cuatro derrotas consecutivas, por lo que Bolea interpreta el partido de Zarautz como «un punto de inflexión. Ya dejamos muy atrás al Zarautz y nos metemos otra vez donde queremos estar. El sábado jugamos en casa contra el Gijón, que es un rival muy complicado, pero con nuestra gente, este equipo es distinto, asi que todo es posible. Últimamente le he visto visos de que puede dar más de lo que ha dado hasta ahora».

Ojalá sea así, empezando por el sábado a las siete, cuando por Artaleku pasará ese Gijón que es segundo clasificado y además el equipo menos goleado de la liga.

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