Ferrer-Dalmau expone una colección de láminas de temática militar

Dieciséis láminas de Augusto Ferrer-Dalmau se exponen desde el pasado viernes en el Centro Cultural Amaia. La sala de conferencias, con entrada desde la calle López de Becerra, acogerá hasta el 15 de septiembre una muestra que reúne obras de temática militar. Se trata de una colección de láminas entre las que priman las relacionadas con la primera guerra carlista.

El artista, nacido en Barcelona en el año 1964, fue en los inicios de su carrera un pintor paisajista, si bien posteriormente se especializó en cuadros de temática militar. En las obras de Augusto Ferrer-Dalmau destaca el estilo realista de las mismas, con atención al detalle. Los temas de sus cuadros abarcan diversos aspectos y épocas de la vida militar.

La obra de Augusto Ferrer-Dalmau, expuesta en numerosos museos, goza de un amplio reconocimiento. Su trayectoria artística y su difusión de la historia militar le han valido galardones como la Cruz de Plata de la Orden del Mérito de la Guardia Civil, la Gran Placa de Caballero de la Orden Imperial de Carlos V o el Reconocimiento de la Inspección General del Ejército. El artista catalán también es miembro de la International Society of War Artists.

Los dieciséis trabajos realizados sobre papel-lienzo por Ferrer-Dalmau podrán contemplarse a lo largo de esta semana y la que viene en el siguiente horario: de martes a sábado desde las 18.00 hasta las 21.00 y los domingos de 11.30 a 13.30 horas. El lunes, la exposición permanecerá cerrada. La entrada a la misma es libre.

También en el Museo Oiasso

Augusto Ferrer-Dalmau no sólo expone actualmente en el Centro Cultural Amaia de Irun; sino que uno de sus cuadros también puede verse en Oiasso. Se trata de la obra 'La batalla de San Marcial', que se expone por primera vez en un museo. Este óleo forma parte de la muestra '1808-1813: Invasiones Napoleónicas', que acoge el Museo Oiasso hasta el 27 de octubre. Este cuadro fue encargado al artista barcelonés por el Ministerio de Defensa, con motivo de la conmemoración de la batalla de San Marcial del año 1813.

El óleo refleja un episodio de dicha contienda: concretamente, y según explicó en la inauguración de la muestra el teniente coronel José Manuel Guerrero Acosta, la obra muestra el final de la batalla, «cuando después de todas las horas de lucha en el monte San Marcial y adyacentes, un último contraataque de las tropas españolas llega hasta el Bidasoa, empujando a los atacantes, que tuvieron que cruzar el río». Entonces, comenzó a caer una intensa lluvia «y eso dio por terminada la batalla».