Anécdotas y curiosidades de pilotos y azafatas

Consejos de pilotos y tripulantes de cabina para tener el vuelo perfecto

La comodidad de un viaje depende del asiento en el que vayas. Si tienes la posibilidad de elegir, no escatimes en ello, sobre todo si el vuelo es largo: más anchos, en ventanilla, en pasillo o cerca del baño. Aunque tengas qeu pagar, merecerá la pena.

Cargar con bultos pesados es agotador. Por eso, lo mejor es llevar lo justo. Deja los 'por si acasos' en casa, haz que tu maleta sea ligera y que tu equipaje de mano sea útil. Te ahorrarás dolores de espalda, entre otras cosas. Además, si se te ha olvidado algo importante, siempre podrás encontrarlo en las tiendas del aeropuerto o en tu destino.

Ve con tiempo al aeropuerto. No sabes los imprevistos que te puedes encontrar en el trayecto y la aerolínea no se va a responsabilizar de ello. Para evitar que el vuelo despegue sin ti, mejor acude antes de la hora límite a los mostradores de facturación. Mejor esperar y matar el tiempo leyendo algo que llegar tarde y tener que pagar un nuevo billete... O peor, perder las vacaciones enteras.

Si los influencers van en chándal al aeropuerto no es porque sean cool, que también, es porque saben lo que hay. Cópialos en esto. Vístete con prendas que te sienten bien y sean cómodas. Y hazlo por capas pues puede que tengas calor en tierra y frío en el aire.

No es un mito, viajar en avión deshidrata la piel. Así que salvo que sea imprescindible, lo mejor es ir con la cara lavada. Si el viaje es largo, échate tu crema varias veces. Y en tierra, ya en tu destino, una buena mascarilla hará magia en tu rostro. Palabrita de los que viajan mucho.

De la misma manera que hidratas tu piel, házlo con tu cuerpo. No se trata de que te eches body milk en el baño, sino de que te hidrates... bebiendo. En cualquier avión cambian los niveles de humedad, así que lleva agua para refrescarte de vez en cuando. Otr consejo: recuerda que el alcohol tiene el efecto contrario al que buscamos.

No está prohibido llevar snacks en el avión, aunque no es muy habitual. Pasar el arco de seguridad nos crea tanta inseguridad que muchas veces creemos que nos lo van a hacer tirar, pero no. Puedes hacerlo perfectamente y es aconsejable que siempre lleves algo saludable y rico en tu bolso, sobre todo si vas a pasar muchas horas en tránsito.

Si vas a hacer un viaje largo, lo aconsejable es descansar durante el vuelo. A veces no es fácil, pero hay que intentarlo. Entre las cosas que no debes olvidar están los tapones de oídos, un antifaz y una almohada de cuello. Te ayudarán en tu propósito

En cualquier viaje, puede que te aburras, y cuando estás en el aire, hay poco que hacer. Así que esé previsor, lleva entretenimiento para esos tiempos muertos: un libro, un podcast, música, películas o series descargadas en la tablet... Sobre todo si volar te pone nervioso.

El síndrome de la clase turista no es un mito, existe. Y la mejor manera de combatirlo es moverse. Para ayudar a la circulación de la sangre en el cuerpo y evitar la formación de trombos lo mejor es levantarse de la butaca cada dos horas y dar un pequeño paseo por el pasillo. Salvo que haya turbulencias o estés en la maniobra de despegue o aterrizaje, nadie te va a decir nada.