Dos horas de locura antes de confirmar el triunfo de Aranburu

El ezkiotarra se muestra como uno de los más fuertes de la carrera y pasa a la ofensiva ante el líder, Schachmann y Grégoire.

Aranburu caza al portugués, que había cogido unos metros y comienzan juntos la bajada. El del UAE sufre para aguantar al ritmo que impone el guipuzcoano.

Almeida se pasa en la trazada en una curva a dos kilómetros de meta y el ezkiotarra se marcha solo con unos metros de ventaja. La velocidad es muy alta.

El corredor del Cofidis cruza la rotonda por el lado derecho, mientras todos sus rivales lo hacen por la izquierda como señalan las flechas. Esa acción provocará la intervención del juez de meta, en el VAR.

Aranburu rueda más fuerte que sus adversarios y aumenta su ventaja. Llega con tiempo suficiente para levantar los brazos y celebrar.

Los comisarios estudian si la acción de Aranburu es constitutiva de una infracción que conlleve descalificación. Las imágenes del directo de la televisión reflejan que el ezkiotarra no respeta el trazado señalizado por las flechas y pasa tras una valla. En primera instancia, parece una irregularidad, que es lo que observa el comisario de meta y se decanta por sancionar.

Aunque los comisarios continúna reunidos y recabando información, se informa de que su decisión va a ser la de sancionar a Aranburu y se procede con la ceremonia del podio. Se revisa el libro de ruta, donde se aprecia que el paso por la rotonda está fijado por el lado derecho, como hace Aranburu, a pesar de que sobre el terreno la valla y las flechas dicen lo contrario. Ahí radica el problema.

Romain Grégoire, segundo en meta, sube a por el ramo de flores con cara de circunstancias. Declara: «Han decidido los jueces porque al parecer Alex no ha hecho el recorrido correcto y han determinado que sea yo el ganador, pero no gusta ganar de esta manera».

Aunque toda la ceremonia de premiación se lleva adelante, los jueces, ante la previsión de que la deliberación sea larga convocan al control antidopaje tanto a Grégoire como Aranburu, a la espera de su decisión final sobre el ganador.

Los jueces siguen reunidos y el equipo Cofidis presenta sus alegaciones. Gorka Gerrikagoitia, uno de los directores del equipo francés, está en la reunión con los comisarios y con el presidente de la organización, Javier Riaño, que explica que ha habido un error en la señalización. Fuera de la sala, otro de los directores del Cofidis, Bingen Fernández, muestra su indignación: «El libro de ruta dice por la derecha. Los jueces han estado viendo las imágenes y el reglamento y no entiendo la decisión».

Aunque ya ha pasado una hora desde que Aranburu cruzó la meta y de que se haya dado por hecha su relegación al último puesto del grupo, aún no hay decisión definitiva de los jueces, que siguen analizando imágenes, testimonios y documentación técnica del recorrido.

La larguísima reunión de los jueces con todos los afectados incluye el análisis de los datos de Veloviewer, el libro de ruta y la información facilitada por el equipo, con lo que se comprueba que «toda la información disponible indicaba que la rotonda en cuestión debía tomarse por el lugar elegido por el corredor del equipo Cofidis», lo que aleja la sanción. Falta hacer oficial la clasificación.

Una hora y 52 minutos después de que Aranburu haya entrado en meta, los comisarios comunican la clasificación oficial, con el ezkiotarra en primera posición. Consideran que tomó la rotonda «por el lado correcto».

El ganador de la etapa sale de la zona reservada para el control antidopaje y, tras un breve encuentro con sus familiares, se encamina a su hotel. No hay forma de realizar la ceremonia del podio, que se realizará este jueves en la salida de Beasain, a las 11.30 horas.