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EL DIARIO VASCO
Sábado, 11 de diciembre 2021, 12:58
Tres camiones de grandes dimensiones se quedaron ayer averiados tras repostar en una estación de Zaisa, en Irun, frente al hotel NH. Al parecer, según han apuntado camioneros de la zona esta mañana, la crecida del río Bidasoa que provocó inundaciones en el polígono Zaisa afectó al depósito madre de gasoil de la estación de servicio, llegando a 'contaminar' el combustible por la entrada de agua. Esto es lo que podría haber provocado que los motores de los vehículos fueran incapaces de arrancar y que tuvieran que solicitar asistencia para poder retomar sus caminos.
Sobre el terreno se observaba esta mañana que los surtidores de gasoil están cerrados y que a los camiones que llegan se desvían a otras gasolineras de Repsol. En cambio, sí están dispensando gasolina. Por el momento nadie de la multinacional ha dado ninguna explicación ni ha confirmado la existencia de este problema, a pesar de que este periódico ha intentado ponerse en contacto en varias ocasiones con los responsables de la estación. Las mismas fuentes indican que desde ayer están limpiando el depósito de gasoil, pero están a la espera de la empresa, que tiene que certificar que está todo bien.
El agua, tal y como indican expertos en la materia, provoca corrosión y erosiona las boquillas de inyección. Puede afectar el proceso de combustión, reducir la lubricidad del combustible y, por lo tanto, dañar los componentes del sistema. Además, el agua en los tanques de combustible es uno de los principales contaminantes para los sistemas de combustible del motor.
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