El elegido por Karlos Arguiñano para sustituirle como presentador

Karlos Arguiñano es todo un veterano en los fogones… y en televisión. El simpático chef de Beasain, de 75 años de edad, lleva 30 años cocinando delante de la cámaras y acumula ya 13 años en 'Cocina Abierta', espacio de gastronomía que presenta en Antena 3 y en el que a diario ofrece todo tipo de platos y consejos de cocina de lo más prácticos y variados. Eso sí, siempre con el carácter dicharachero y cercano que le caracteriza, y que ha convertido su programa en un gran éxito de audiencia.

Sea como fuere, este jueves Karlos Arguiñano cambió de registro y en una entrevista a Sonsoles Ónega el guipuzcoano habló sobre su perfil menos conocido, el de su vida personal y su familia. Con todo, no dudó en resaltar las grandes cualidades culinarias que atesoran sus hijos, especialmente Joseba Arguiñano, cuyo espacio gastronómico en ETB coincide en la misma franja horaria que el suyo en Antena 3.

«¿Todos tus hijos cocinan bien?», le preguntó la presentadora. Y del de Beasain contestó sin pensárselo dos veces: «Cocinan bien todos, pero tengo algunos que son unos fenómenos. Joseba es un fenómeno», destacó. Y el Premio Nacional de Televisión continuó con su explicación.

«Algunos le conocéis (a Joseba Arguiñano) porque va una vez a la semana a mi programa, pero en el futuro, yo creo que puede sustituir tranquilamente a su padre porque tiene unos conocimientos extraordinarios. Está mucho más preparado que cuando yo empecé. Yo también hice hostelería. Ahora, por suerte, el que quiere prepararse puede», sostuvo.

Eso sí, Karlos Arguiñano no quiso olvidarse de las grandes dotes de sus otros hijos, que también se mueven como pez en el agua en el ámbito gastronómico: «Tengo a Zigor, que es jefe de cocina y cocina como los ángeles. El mayor, Eneko, es el metre. Martín, el cuarto, el que tiene más carácter, es el gerente. Maneja todos los terrenos. Charlie, que es realizador, acaba de terminar una serie en Madrid, no es cocinero, pero cocina como para el mejor restaurante. Amaia, la pequeña, cocina sencillo, pero maneja lo fundamental. María, la argentina, lleva 25 años trabajando con Zigor, es su mano derecha», desveló a Sonsoles Ónega..

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