El público del Kursaal respalda el estreno en el largometraje 'Suro', del donostiarra Mikel Gurrea

El tema que Gurrea ha elegido para su ópera prima proviene de la experiencia que tuvo hace años cuando pasó una temporada en la saca de corcho en Cataluña. De ahí surgió la historia de Helena e Iván, que se proponen construir una nueva vida en los bosques de alcornoques, pero sus diferentes puntos de vista sobre cómo vivir en la tierra emergen, desafiando su futuro como pareja.

Gurrea ha explicado este lunes en la rueda de prensa posterior a los dos pases matinales que se trata de una historia de contradicciones, tanto en la esfera íntima como en la social, «pero son los espectadores, a los que proponemos un viaje, quienes deben debatir sobre la razón y las consecuencias de esas formas de actuar. Yo solo presento una ficción».

Vicky Luengo es Helena, una mujer que recibe la herencia de la finca de alcornoques. La actriz mallorquina asegura que es el papel «más bonito y complejo que he tenido hasta ahora» y que menos ha preparado «hacia fuera». Generalmente su modo de trabajo es fijarse en elementos externos para construir el personaje, pero en esta ocasión «lo he afrontado desde mí, desde mis miedos y sensaciones».

En una escena que transcurre en una fiesta, la protagonista se deja llevar y la actriz hizo lo mismo. «Es la escena que menos he preparado en mi vida y la que más he disfrutado. Nadie, ni tan siquiera el director, sabía lo que iba a hacer. A Mikel le dije que me marcara hasta dónde podía llegar porque yo era capaz de ponerme a mear. Solo me dejó claro que no quería que la provocación al marido fuera acercándome a otro hombre».

Ese marido, Iván, está interpretado por Pol López. El intérprete barcelonés ha explicado a los medios que «hemos buscado entender a nuestros personajes desde nosotros, entender sus contradicciones a través de las nuestras y eso ha requerido muchas horas de conversaciones».

Respecto a Luengo y López, Gurrea destacó que «son monstruos guapos de la interpretación, muy generosos y muy currantes» y «se ponen a tumba abierta dispuestos a algo que es muy difícil, lo ambiguo», mientras que de Ilyass El Ouahdani, que no es actor profesional y esta es su primera experiencia ante la cámara, ha dicho que tras un «casting muy extenso» cuando apareció notó que «tenía ese algo especial, que no es sólo una manera de estar delante de la cámara, sino de darse». «Durante un mes o dos y pico tallerizábamos y durante dos horas nos metíamos en Karim», su personaje, ha relatado.

En cuanto al mundo del suro, corcho en catalán, ha señalado que «hacer cine es bonito por muchas razones, pero también porque cuando hay algo que te gusta, quieres que tenga un lugar en el cine, desde la ficción»