Bilbao
Domingo, 14 de noviembre 2021
La organización del festival, encabezada por Jose Ramón Garai, gerente de Baiko, tomó la decisión de detener la final entre Jokin Altuna y Unai Laso cuando el electrónico del Bizkaia señalaba el 19 iguales. Según fuentes consultadas, una llamada telefónica del Gobierno Vasco para mostrar su disconformidad con la falta de cumplimiento de la normativa vigente, que incluye la obligatoriedad de que los espectadores lleven mascarilla en los recintos deportivos cerrados, precedió la determinación, recibida con disgusto y sorpresa por los pelotaris, y con incredulidad e incomprensión por buena parte del público.
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Esas mismas fuentes añaden que «el toque de atención vino desde la Consejería de Sanidad», que puso en vilo a los responsables de un frontón en cuyo palco se encontraban Andoni Ortuzar, presidente del Euskadi Buru Batzar, y Aitor Esteban, diputado del PNV en Madrid, entre otras autoridades políticas e institucionales.
Los pelotaris entraron al interior del vestuario mientras se informaba al público de la razón del parón y se comunicaba que en caso de persistir la negativa al uso de la mascarilla cabía la posibilidad de la suspensión definitiva de la final.
El paréntesis duró cinco minutos. Para entonces los pelotaris habían regresado a la cancha para pelotear y mantener el cuerpo a tono. En cuanto los organizadores consideraron que el cumplimiento de la norma era suficiente, Garai dio orden a los jueces de reanudar la final.
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Con anterioridad al 19-19, los responsables del frontón habían recordado por megafonía en repetidas ocasiones de la obligatoriedad del uso de la mascarilla. Sin embargo, al igual que la mayoría de los 2.360 espectadores presentes en el frontón respetaron la orden ya con anterioridad, grupos de aficionados hicieron caso omiso de la llamada y no atendieron a los requerimientos del personal de seguridad en distintos puntos.
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Varios expelotaris y aficionados presentes en el recinto criticaron el momento en el que se detuvo la final. «No puedes hacer eso con el 19 iguales. Había que terminar como fuera».
Uno de los asistentes iba más allá en su apreciación. «Llevar la mascarilla es por el bien de todos y algo que toca hacer en estos difíciles momentos. A quien no lo cumple hay que expulsarlo del frontón, así de claro. Pero los que se quitaron la mascarilla no lo hicieron en el 18-18. Una decisión de ese calado hay que tomarla antes de empezar o nada más iniciarse la final, no con el 19 iguales».
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