«Iban cruzando por las vías y el maquinista les avisó con la bocina»

Eran las 20.26 horas de la noche, y al maquinista que conducía el tren de cercanías que realizaba el trayecto entre Zumarraga e Irun le quedaban tres paradas para llegar a su destino. A su paso por Gaintxurizketa, vio a dos personas sobre las vías del tren, caminando. Inmediatamente hizo sonar su bocina, una, dos, repetidas veces. Los peatones no reaccionaban a sus señales. Sin poder evitarlo, el convoy acabó arrollando a uno de ellos, un menor guipuzcoano de 16 años y vecino de la comarca de Oarsoaldea que murió en el acto.

Así vivió desde su cabina el desgraciado accidente ocurrido durante la tarde noche del miércoles el conductor del tren, que está muy afectado por lo ocurrido, tal y como informan fuentes cercanas. La Ertzaintza investiga ahora por qué el menor fallecido no supo reaccionar a tiempo para evitar el impacto del convoy, aunque se baraja la posibilidad de que la causa se deba a un mero despiste.

En el momento del trágico suceso el joven, que estaba internado en el centro de menores de Uralde bajo la tutela de la Diputación de Gipuzkoa, se encontraba junto a otro menor que tras el accidente salió corriendo a pedir auxilio hasta el recurso, situado apenas a 100 metros de la estación donde tuvieron lugar los hechos.

Ayer varios vecinos de la zona comentaban lo ocurrido en la estación, situada en el término municipal de Lezo, donde tan solo realizan parada las máquinas del Topo de Euskotren, ya que Adif suprimió la suya. Uno de ellos aseguraba haber hablado con los dos menores minutos antes de que ocurriera todo. «Pasaron por la huerta y como ya les conozco, les pregunté si se iban a jugar a pelota». Al parecer los jóvenes se dirigían a coger el Topo, por lo que tenían que cruzar por el paso a nivel sobre las vías hasta la estación, un paso denominado de tipo F y que es exclusivo para peatones y ganado. Por causas que se desconocen, ambos jóvenes no reaccionaron ante la llegada del tren de cercanías, y tampoco ante las insistentes señales sonoras que les realizó el maquinista del mismo.

Una vecina aseguró haber escuchado los bocinazos del tren antes del estruendo por el golpe. «Iban cruzando por las vías y el maquinista les avisó», dijo. Uno de los menores, de dieciséis años y vecino de la comarca de Oarsoaldea, fue arrollado varios metros por el convoy y falleció en el acto.

Hasta el lugar se trasladaron efectivos de la Ertzaintza, así como dotaciones de bomberos y personal sanitario, que no pudieron más que certificar la muerte del joven. El cadáver fue trasladado al Servicio de Patología Forense de San Sebastián donde se le practicó la autopsia. La circulación ferroviaria se vio interrumpida durante unas horas, aunque el servicio recuperó la normalidad a partir de las 22.35 horas, informan desde Adif. Los pasajeros del tren que cubría el trayecto entre Zumarraga e Irun fueron trasladados a sus destinos en autobuses fletados por Renfe.

La propia diputada de Políticas Sociales, Maite Peña, acudió al lugar del accidente tras conocer que el fallecido era un menor que estaba internado bajo la tutela de la Diputación. Asimismo, Peña visitó a los responsables y al resto de menores que conviven en el centro de Uralde, ubicado a escasos 100 metros de la estación de Gaintxurizketa, que se mostraron muy conmocionados y dolidos por la pérdida.

La Ertzaintza mantiene abierta la investigación y está recabando los testimonios de los testigos, entre ellos el menor que acompañaba al joven fallecido en el momento del accidente, que tuvo que ser atendido por los sanitarios por sufrir un ataque de ansiedad tras presenciar el trágico accidente.

Por su parte, la Diputación de Gipuzkoa quiso ayer mostrar sus «condolencias» a los familiares y allegados del menor, así como a las personas que «le han estado cuidando» en el centro de menores Uralde. El portavoz de la Diputación, Imanol Lasa, lamentó este «grave accidente» que la Ertzaintza está «investigando» para «analizar lo acontecido».

Asimismo el Ayuntamiento de Lezo quiso también trasladar su pesar por la muerte del menor y mostró compromiso para intentar «mejorar la situación» de ese punto y evitar que se repita una situación similar.

Según explicó en un comunicado, con el objetivo de aclarar lo sucedido, el Consistorio está colaborando con las demás entidades para «aclarar los hechos a la mayor brevedad posible, mejorar la situación del paso de Gaintxurizketa y evitar que se repita una situación similar».

En ese sentido, aunque el paso peatonal no es competencia del Ayuntamiento ya que depende de Adif, el Gobierno municipal mostró su compromiso de «hacer todo lo que esté en sus manos para solucionar la situación actual a la mayor brevedad posible y que en el futuro no se produzcan más accidentes».

El lamentable suceso ocurrido este pasado miércoles trae a la memoria los dos casos de arrollamientos de tren más recientes ocurridos en Gipuzkoa. El último se llevó la vida de una joven de 18 años en Legazpi, que murió el pasado 30 de diciembre arrollada por un Alvia en la estación de la localidad, cuando cruzaba el paso de peatones al nivel de las vías, después de haberse apeado del tren de cercanías junto a un grupo de amigas.

El 13 de mayo de 2015 los dos ocupantes de un turismo, de 38 y 21 años, fueron arrollados por un tren de mercancías de Renfe en el paso a nivel de Itsasondo. Ambos resultaron heridos de gravedad a consecuencia del accidente. Al parecer la conductora del vehículo cruzó las vías por un lugar indebido, cuando las barreras del paso a nivel estaban bajadas.