Efecto dominó en políticas sociales

La vivienda en Euskadi está fuera del alcance de ciertos sectores, sobre todo, jóvenes y personas de origen extranjero. La oferta de parque de vivienda para compra o alquiler es escasa y con precios desorbitados.

Euskadi necesita influir y regular los precios de la vivienda y eso se consigue no solo con una Ley de Vivienda que tope los precios, sino que precisa además un aumento de la vivienda de propiedad o de gestión pública que permita poner en el mercado mucha vivienda en régimen de alquiler y a precios asequibles.

El problema actual de la vivienda tiene importantes efectos 'dominó' sobre otros subsistemas y procesos sociales.

Afecta al proceso de emancipación juvenil por la dificultad de poder pagar una vivienda, ya sea en alquiler o propiedad, por su alto costo: la edad media de emancipación juvenil en Euskadi es de 29,7 años, muy superior a la europea (26,5 años) y a la que la juventud consideraría ideal (24,5 años).

Y tiene también efectos indeseados en la natalidad de la juventud: en la medida que no pueden acceder a una vivienda, su proyecto vital se retrasa y en ocasiones incluso implica la renuncia a tener más hijos/as.

Además, la falta de vivienda asequible perjudica gravemente los procesos de integración social de los y las jóvenes extranjeros sin acompañamiento familiar que cumplen la mayoría de edad y los y las jóvenes en situación de calle que necesitan cubrir necesidades básicas.

Tirando del hilo, tenemos que facilitar el proceso de integración social de las 20.000 personas de origen extranjero que llegan anualmente a trabajar a Euskadi: van a necesitar una vivienda digna para desarrollar su proyecto vital y poder aportar a la sociedad vasca en la medida de sus potencialidades.

La escasez de vivienda pública en alquiler asequible para los colectivos más desfavorecidos (mujeres, personas de origen extranjero y juventud) no hace sino agravar las desigualdades sociales e impedir avanzar hacia una sociedad más justa y cohesionada.

Las políticas públicas en vivienda también influyen en los procesos de turistificación y de segregación escolar de ciertos centros educativos.

En consecuencia, la vivienda es el elemento que tiene mayor repercusión en otros subsistemas de bienestar en Euskadi, y una apuesta decidida y una buena gestión de un amplio parque de vivienda de propiedad o gestión pública en alquiler abrirá la puerta, descongestionará e influirá positivamente en otros subsistemas.