El enlace del TAV enfrenta a Goia y al diputado de Álava en vísperas de la asamblea del PNV

En una intervención en euskera en ETB de apenas 36 segundos, breve pero contundente, Goia pronunció unas duras palabras contra González, al que calificó de «egoísta» y al que acusó de carecer de «visión de país» por apostar por la vía alavesa en lugar de la guipuzcoana, que comunicaría la estación de Ezkio, ya construida, con Navarra a través de la sierra de Aralar. La opción guipuzcoana tiene la principal ventaja de que ahorra tiempo, algo decisivo para la competitividad del tren, mientras que los partidarios de Vitoria apelan al menor coste de la obra y a un supuesto menor impacto ambiental en Aralar.

El primer edil donostiarra, que hasta ahora había mantenido un perfil discreto en este asunto, destacó la importancia del enlace de Ezkio –«el más adecuado sin lugar a dudas»– y abogó por que Gipuzkoa, Navarra y Euskadi respalden este proyecto estratégico. «Será más fácil o complicado, pero aquí las cosas se consiguen peleando. Esa tiene que ser la pelea de Gipuzkoa, de Navarra y de Euskal Herria si tenemos una visión de país», argumentó.

Unas manifestaciones que encontraron respuesta con rapidez en el bando alavés, donde produjeron «sorpresa» y un profundo malestar, aunque el tono fue más comedido. «Quienes ocupan puestos institucionales tienen la responsabilidad de actuar con respeto», subrayaron fuentes cercanas al máximo dirigente de la Diputación de Álava. El PNV, como partido, ha defendido históricamente la vía de Ezkio aunque con la actual controversia ha mantenido una postura más prudente de esperar a los estudios técnicos, en línea con la postura del Gobierno Vasco.

En las últimas semanas se ha producido una catarata de reacciones sobre esto asunto, tanto por representantes del PNV como del PSE, que son socios de Gobierno en Lakua y en las tres Diputaciones forales. Primero fueron los socialistas alaveses –también los navarros– los que defendieron a ultranza la vía alavesa. «Se hará por Vitoria sí o sí», llegó a expresar el secretario general de los socialistas alaveses y consejero de Turismo, Javier Hurtado, el pasado 23 de febrero.

Desde Gipuzkoa, apenas dos días después, la diputada general Eider Mendoza salió al paso de esas opiniones, ante las que se mostró «sorprendida», y elevó el tono para defender la conexión guipuzcoana. «Se están haciendo declaraciones frívolas sin informes», criticó, además de solicitar una reunión urgente con el ministro de Transportes, Óscar Puente. En esa dirección, se mostró «sorprendida» por el cambio de criterio «en muy pocos meses» de los socialistas navarros».

Mendoza defendió ese día que «estamos convencidos de que la mejor alternativa es por Ezkio-Itsaso desde el punto de vista competitivo y el medioambiental» y agregó que respetarán el proceso, en el que todavía se tienen que realizar las catas en la sierra de Aralar, aunque esgrimió que «nuestra postura es respetuosa y humilde pero firme».

También Adegi y la Cámara de Comercio defienden que el enlace se haga por Ezkio de acuerdo a las conclusiones técnicas que presentaron los Gobierno vasco y navarro al proyecto inicial de 2018.

Esos informes técnicos subrayan que la vía por la localidad de Ezkio es más corta –44 minutos por 63 de la vía alavesa–; que tiene menor impacto ambiental tal y como concluyó el propio informe del Ministerio de Transportes; y además existe una tercera vía que bordearía Aralar manteniendo el ahorro de tiempo.

El Ministerio todavía no ha concluido los informes técnicos y considera que «las tres opciones están abiertas», aunque considera que hay dudas técnicas sobre la vía por Ezkio por cuestiones, sobre todo, económicas y de plazos más largos de ejecución.

La infraestructura del TAV, que los dirigentes políticos vascos definen como crucial para mejorar la conectividad y el desarrollo económico de Euskadi, ha estado salpicada de retrasos que han provocado malestar social.

Ahora, con el debate sobre si el enlace con Navarra debe ser por Gipuzkoa o Álava, por Ezkio o por Gasteiz, que enfrenta incluso a compañeros de la misma formación política en un hecho prácticamente inédito, se alcanza una nueva dimensión que vivirá con casi toda seguridad más capítulos próximamente y que evidenciará también los siempre delicados equilibrios territoriales. El enredo del TAV continúa.