PNV y Bildu critican el fallo del Supremo contra el traspasode la homologación de títulos

La decisión del Tribunal Supremo de el traspaso de la competencia de la homologación de los títulos obtenidos en el extranjero ha provocado una nueva tormenta política en Euskadi. El PNV pidió ayer crear un 'frente común' ante la decisión del Supremo al considerarla una «mala noticia» para la política y la sociedad. En la misma línea, EH Bildu pidió que se active un nuevo estatus político para evitar que se «subordinen los derechos» de Euskadi y el PSE reclamó «calma» para analizar la decisión y actuar ante ella. Por su parte, el PP apoyó la decisión del Supremo y expresó que el autogobierno se había «entrometido» donde «no le llamaban».

Las reacciones llegan después de que este pasado viernes la Sección Cuarta de la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Supremo (TS) haya anulado en su totalidad el Real Decreto 366/2024, de 9 de abril, por el que se traspasan a Euskadi funciones y servicios en materia de homologación y declaración de equivalencia de títulos obtenidos en el marco de sistemas de educación superior extranjeros a un título universitario oficial español.

En una tertulia radiofónica, el portavoz parlamentario del PNV, Joseba Díez Antxustegi, calificó la decisión del Tribunal Supremo como «una mala noticia no solo para el Gobierno Vasco ni para el PNV, sino para el conjunto de Euskadi, porque tiene una trascendencia política», que señalí, es un «ataque directo» al autogobierno y el Estatuto de Gernika, «pero tiene sobre todo una trascendencia práctica». La trascendencia práctica la enmarcó en la falta de profesionales, «sobre todo en el ámbito sanitario». «Nos faltan médicos y médicas, enfermeros y enfermeras, nos falta personal sanitario», advirtió, para añadir que la transferencia de homologación posibilitaba «personas con títulos extranjeros pudieran incorporarse al mercado de Euskadi y pudieran aportar a los servicios públicos, en este caso también de salud».

Es por ello que reclamó a «todos los agentes de este país, a todos los partidos políticos, a todas las instituciones» que conformen un «frente común» y se defienda el autogobierno, «no solo por defender un Estatuto de Autonomía, sino por defender las implicaciones prácticas». Así, apeló directamente «incluso al Partido Popular, para que defienda Euskadi, que defienda el autogobierno, que defiendan realmente la calidad de vida de los ciudadanos». «Pedimos que estéis a la altura», concluyó.

Desde EH Bildu, la parlamentaria Diana Urrea manifestó que esta decisión es «un buen ejemplo» que refleja «que el autogobierno está absolutamente mutilado, lastrado y con la necesidad de un nuevo estatus político». «Una vez más, estamos viendo cómo se subordinan nuestros derechos y nuestros intereses frente al Estado español», demunció Urrea.

A juicio de la parlamentaria del PSE, Estibaliz Canto, «más allá de frentes y declaraciones exageradas» lo que requiere esta decisión es un análisis «con cautela y con calma».Aseguró que las consecuencias de la decisión son «malas». para «muchas personas» y exigió responder «con la cabeza fría».

La parlamentaria del PP del País Vasco, Laura Garrido, señaló por su lado que «defender el autogobierno es hacer las cosas bien» y, en el caso de esta anulación de traspaso, «cuando se entromete donde no le llaman, pasan estas cosas». Garrido pidió también al partido jeltzale que no lance «mensajes catastrofistas y victimistas, porque además parece que esconden claramente un chantaje al Estado» con un discurso que es «recurrente» cuando «las cosas no le salen bien».

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