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La Real Sociedad estrena hoy en Niza la nueva Europa League con la necesidad de ganar y recuperar las buenas sensaciones para revertir la mala dinámicaNo se puede engañar a nadie. La Real Sociedad no está en buen momento, ni en lo anímico, ni en lo táctico ni evidentemente ... en lo numérico puesto que solo suma cinco puntos de veintiún posibles en la Liga. Las caras en el avión rumbo a Niza no eran las mejores, como si la necesidad se hubiese apoderado de algunos futbolistas. Sin embargo, este grupo de jugadores ha demostrado y se ha ganado la confianza de creer en ellos. No solo por lo que han enseñado sobre el verde, también porque está capitaneado por un Imanol que merece la confianza de la afición y de sus jefes. No puede haber un escenario más prestigioso e idóneo que un partido europeo para revertir la mala dinámica. Espera el Niza de Momo Cho (21.00 horas), que apunta a ser baja por molestias en el talón. No entrenó ayer.
La Real se estrena en la nueva Europa League sin grupos como tal y con 36 equipos que se pegarán por no caer eliminados a las primeras de cambio. Con esas ocho jornadas hasta finales de enero, la plantilla de Imanol sí que tiene un tiempo que en Liga no posee. No es lo mismo disputar seis encuentros en un grupo cerrado con cuatro adversarios en el que tienes que empezar con buen pie que ésta Europa League que te aporta margen para fallar. Ni mucho menos la Real se dejará llevar, puesto que Imanol quiere ganar hasta en los amistosos, pero casi es más importante el fondo, el cómo, el no venirse abajo para salir de esta mala dinámica que los tres primeros puntos europeos. Ya se hablará de la Liga a partir de mañana.
En lo deportivo se esperan retoques en una alineación que tendrá cambios. La lógica invita a pensar que aquel tridente formado por Barrenetxea, Kubo y Mikel Oyarzabal que maravilló a Europa en la Champions se plante esta noche en el Allianz Riviera de Niza con intención de romper de una vez por todas la peligrosa falta de gol. Barrenetxea, sin minutos en Valladolid, debe recuperar el nivel que aportó en la fase de grupos. El equipo necesita su desborde, algo que aportará Kubo en el otro costado. En la delantera no parece haber discusión tras la titularidad de Óskarsson en Valladolid. Cuando a Oyarzabal se le necesita, el capitán suele acudir a la llamada de auxilio. La situación no es un SOS, pero el '10' también se tiene que echar el equipo a la espalda.
Las modificaciones llegarían en defensa, con Aihen en la izquierda, Aritz en la derecha y con Aguerd y Zubeldia como pareja de centrales, quizás las dos únicas certezas de lo que llevamos de curso. Si el marroquí ha recuperado bien y si sus isquios le responden, debería ser titular puesto que se ha convertido en el capo de la defensa. Zubimendi, Sucic y Sergio podrían formar la medular, sin olvidarse de que el oriotarra también podría sorprender con algún hombre secundario como Pablo Marín que ya sabe lo que es disputar partidos continentales de primer nivel.
Se cruzan por el camino dos rivales en dinámicas diferentes. La Real viene golpeada y el Niza todo lo contrario, lanzado puesto que se le caen los goles de los bolsillos. Eso sí, no todos los días son viernes y se consigue marcar ocho caracoles. La Real está capacitada para hacer daño a un Niza que también se expone. Los goles no pueden esperar y deben llegar esta noche en Niza.
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