Han pasado ya 26 años...

Desde el inicio del partido se vio que el Barça se había tomado muy en serio la visita del líder a su casa, presionó como no lo estaba haciendo en lo que llevamos de temporada y vimos a un Messi más entonado que últimamente. Lo mejor, casi, fue el resultado, ya que los blaugrana hubieran merecido irse al descanso con mayor ventaja. La segunda parte fue otra historia, incluso antes de hacer los cambios. La Real se sacudió la presión, se dio cuenta de que podía irse hacia adelante con el balón y generó las mejores ocasiones del encuentro. No las aprovechó y el lastre de la primera parte fue demasiado grande.

A pesar de la mala primera parte de la Real, también hubo cosas positivas, como el gol de Willian José. No sólo porque parece que el brasileño empieza a estar en una buena racha, sino porque por una vez la Real no necesitó muchas ocasiones. Ni siquiera jugar bien. En la primera clara llegó el gol. Eso sí, en la segunda mitad, la historia fue otra. Se generaron ocasiones, pero Isak sigue sin acertar. Lento, fallón en el control de balón y dando claras muestras de falta de confianza. Imanol sigue dándole oportunidades, pero no las aprovecha. Lo positivo de la segunda parte, además del juego, el debut de Robert Navarro.

Mucho se habló y escribió antes del partido sobre las importantes bajas de Silva y Oyarzabal para enfrentarse a todo un Barça a domicilio, aunque el equipo ya hubiera demostrado en Nápoles su capacidad para pelear de tú a tú con cualquiera. Pero ayer el equipo sufrió mucho desde el inicio, sin poder tener el balón. Aunque en la segunda parte tuvieron el control del juego, lo cierto es que el eibarrés y el canario son vitales en ese centro del campo en el que se gesta el fútbol de la Real. Continuamos sin Illarra, y Merino sigue cargándose de minutos, sin un Guridi que pueda sustituirle. Esperemos que, como parece, el '10' esté ya para el Levante.

Es evidente que no es el título más codiciado, que no es el que más emociones despierta entre los aficionados, pero seguro que a cualquier realista le haría ilusión sumar una copa más al palmarés del club, habida cuenta de que desde 1987 el equipo masculino solo ha añadido el título de campéon de Segunda. Hoy, de alguna manera, comienza el camino hacia la consecución del que podría ser el primer trofeo de la Real de Imanol, el de la Supercopa, con el sorteo de las semifinales que se disputarán el 13 y el 14 de enero. El rival: Real Madrid o Barça. La final, el 17. ¿Y qué tal Illarra levantando la Copa por San Antón?