Fallece un vecino de Donostia de 47 años mientras hacía rápel en el Pirineo aragonés

Según ha podido saber este periódico, la víctima era policía nacional y trabajaba en la comisaría del paseo de Urumea desde hace más o menos un año. Las fuentes consultadas agregan que había realizado las prácticas en la localidad oscense de Jaca, donde conservaba muchos compañeros y amigos, con los que practicaba deporte con frecuencia. Gran enamorado del deporte y del Pirineo, Javier, que no tenía hijos, había acudido a hacer barranquismo esta semana con varias personas.

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En lo que respecta al accidente de ayer, se activó el Grupo de Rescate e Intervención en Montaña de la sede de Panticosa, la Unidad Aérea de Huesca y el equipo médico del 061, y la Guardia Civil indica que «tras sobrevolar la zona localizaron al barranquista, el cual presentaba signos incompatibles con la vida».

Fue evacuado a la aeronave y trasladado al Helipuerto más cercano, «donde esperaban los servicios funerarios para su posterior traslado al Instituto de Medicina Legal de Huesca». Fue el cuarto de los cinco rescates que tuvo que completar la Guardia Civil ayer.

Está siendo un mes especialmente trágico en el Alto de Aragón en relación a esta disciplina, porque la muerte de este donostiarra de 47 años es la tercera en menos de 30 días en la actividad de barranquismo. El 14 de abril sucedió en Tella-Sin y el 30 de abril en la cascada de Sorrosal, en Broto.