Agentes de paisano se adentrarán en los entornos festivos para detectar pinchazos

Una de las medidas que se ha concretado en la comisión es que se realizarán vigilancias preventivas para evitar delitos contra la libertad sexual, una labor de prevención que realizarán patrullas a pie conjuntas de la Ertzaintza y la Guardia Municipal. El concejal de Seguridad Ciudadana de Donostia, Martin Ibabe, ha señalado que este tipo de patrullas conjuntas se vienen realizando desde hace tiempo y «nos aportan mucha visión técnica y recursos» para mejorar los protocolos de seguridad. Esta Semana Grande, ambos cuerpos de seguridad ampliarán sus patrullas a diferentes ambientes festivos que se darán cita a lo largo de la semana en la ciudad, tomando como eje principal los entornos de Parte Vieja, Centro y Gros.

La Guardia Municipal y la Ertzaintza seguirán apostando por sus recursos conjuntos y, cuando sea posible, tratarán de asegurar la presencia de al menos una agente femenina para el supuesto de que suceda una agresión o un episodio de violencia de género. A su vez, el jefe de la Ertzaintza, Josu Bujanda, ha indicado que, en lo que se refiere a la cantidad de agentes de la Policía vasca, se mantendrá un despliegue similar al de otros años, aunque se reforzará en espacios y lugares con afluencia masiva de ciudadanos. Lo que es seguro es que aumentará el número de efectivos respecto al resto del año y se colocarán efectivos específicos para los diferentes ambientes.

Ibabe ha destacado también la importancia de la colaboración de la ciudadanía para que todas las personas puedan disfrutar de las fiestas.

Martin Ibabe se ha pronunciado también sobre la alarma social que han generado los pinchazos que varias chicas han denunciado en Euskadi. Ha señalado que es una cuestión «que nos ocupa y preocupa» y ha indicado que se activará un dispositivo que abordará específicamente este tipo de conductas. Según ha señalado Josu Bujanda, la Ertzaintza y la Guardia Municipal mantienen varias investigaciones abiertas y tienen todo tipo de hipótesis ya que, de momento, no tienen marcado ningún perfil concreto de posibles agresores. Asimismo, tampoco disponen de analíticas que hayan dado positivo en ninguna sustancia con intencionalidad de sumisión química. La Ertzaintza y la Guardia Municipal estarán en los espacios de ocio nocturno o recintos festivos y desplegarán a personal uniformado pero también de paisano para detectar a cualquier sospechoso de agredir a una mujer.

El jefe de la Ertzaintza ha hecho hincapié en la importancia de llamar al 112 en estos casos para poder atender a la víctima. Una de las funciones principales de aquellos agentes de seguridad vestidos de paisano es la atención de las víctimas para poder trasladarlas a un centro hospitalario y, a su vez, para que la Ertzaina y la Guardia municipal pueda recabar información sobre el agresor.

Mañana comienza el primer reto para la Ertzaintza y la Guardia Municipal con la bajada de Celedón en las fiestas de la Blanca en Vitoria y «estamos disponiendo de un dispositivo especial, además del de seguridad para controlar las fiestas», ha comentado Josu Bujanda.