Crimen vicario en Navarra

Doloroso y masivo adiós en Estella al niño muerto en Urbasa a manos de su padre

Según informa Diario de Navarra, se bailó en su recuerdo un aurresku y se interpretó al txistu la melodía el Txoria txori, (El pájaro, pájaro es) la canción de Mikel Laboa cuya letra dice 'Si le hubiera cortado las alas, hubiera sido mío, no se habría ido, pero así habría dejado de ser un pájaro… y yo lo que amaba era el pájaro'. El reloj de la iglesia se acercaba a las ocho de la tarde y cientos de personas se dispersaban, calladas y cabizbajas, desde la plaza y sus porches hacia la calle Baja Navarra, en dirección hacia otro escenario del centro Estella.

Ese río caminó hasta la Coronación, donde el movimiento feminista de Estella había convocado una concentración «contra la violencia vicaria», el lema que figuraba en la pancarta durante un acto que se prolongó con el mismo silencio durante un cuarto de hora y extendiéndose hasta la calle San Andrés. El duelo por la muerte del pequeño se vivió en ambas plazas pero no cesó en realidad en todo momento desde que se conoció la tragedia en la ciudad donde vivía con su madre. Siguen los tres días de luto oficial que el Ayuntamiento decretó el martes tras localizarse los cuerpos y, con ese motivo, se suspendió la presentación de la comunidad energética del barrio de Lizarra prevista para ayer por la tarde con el deseo de los organizadores era acompañar a la comunidad en esos duros momentos.

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Fueron constantes los mensajes de duelo y lazos negros en las redes sociales de colectivos, partidos políticos y asociaciones. Y quedaron gestos emotivos como el que bajo los soportales de la plaza de los Fueros dejó el Bar Restaurante Florida. Con motivo del funeral, y en señal de duelo, suspendió a las siete de la tarde el servicio, apagó las luces y la música del local. Mientras, en Lizarra Ikastola, el centro donde el niño cursaba 2º de Primaria el luto se sigue viviendo en la intimidad y un altar en el frontón le rinde homenaje.