Una cuestión de respeto

No se hablaba de otra cosa en la salida de ayer en Vitoria. Las dichosas caídas. Y para colmo, se cae Landa. Cada uno vertía su opinión en el entorno mientras entre los ciclistas es como tabú hablar del tema. Es mejor no pensar en ... ello cuando tienes que competir. Pero sí que es verdad que todos los equipos comentan que cada vez hay más tensión en carrera y se va muy rápido. Lo que ocurrió bajando Krutzeta tiene un componente de mala suerte pero sí que se comenta entre corredores que la disputa dentro del pelotón por la colocación es constante incluso en los momentos que no parecen decisivos. Eso aumenta el riesgo. Hace unos años, cuando corría yo, el pelotón se lo tomaba con otra calma. Siempre ha habido unas reglas no escritas. Muchos puertos los bajábamos de uno en uno. No se adelantaba por dentro en las curvas. Ahora ves que un equipo encabeza el grupo y al rato le pasa otro por un costado y toma el mando. Todos quieren ir delante. Hay más frenazos... La UCI hace sus esfuerzos por mejorar la seguridad y también las organizaciones innovan en la toma de medidas. Pero más allá de ello, sí que cabe una reflexión por parte de equipos y corredores. También es una cuestión de respeto. De comportamientos dentro de pelotón que se deberían recuperar por el bien de todos. En cuanto a la carrera, ha quedado más abierta. Hay muchos corredores en pocos segundos. El duelo parece servido entre Skjelmose y Ayuso, pero no se puede olvidar a varios corredores que están al acecho. Uno de ellos, el propio Ion Izagirre. Ya demostró en la edición que ganó que no solo las subidas, también las bajadas cuentan un día como hoy. Es una jornada para estar atento todo el rato. El encadenado de Azurki, Gorla y Krabelin puede marcar. Aunque haya un equipo dispuesto a controlar, un movimiento fuerte ahí puede poner todo patas arriba. Será un día duro y bonito, con el ingrediente de la afición en las cunetas.