La Ertzaintza dice que la empresa usó más terreno del autorizado

En dicho informe de la Er-tzaintza, que fue remitido al juzgado el pasado noviembre, se habla de «indicios racionales» de un delito de ordenación del territorio porque el gestor del vertedero incumplió las normas en al menos dos cuestiones: la licencia de apertura y actividad concedida por el Ayuntamiento de Zaldibar y la aprobada por el Gobierno Vasco. Según la autorización de la que disponía, Verter podía utilizar un área de 137.000 metros cuadrados, pero hizo uso de 65.000 más, el equivalente a 13 campos de fútbol. Algunas de estas parcelas tenían la calificación de actividad agropecuaria y una más de explotación. Verter las aprovechó para acumular residuos y construir edificios auxiliares.

El juzgado de Durango que instruye el caso de Zaldibar citará en los próximos meses como investigados, previsiblemente a mediados de abril, a tres técnicos de Medio Ambiente del Gobierno Vasco. A dos de ellos los cita por la autorización ambiental que recibió Verter en 2011 y a una tercera técnico por las inspecciones realizadas en 2017, tres años antes del derrumbe.

Fuentes del departamento vasco de Medio Ambiente señalan que «el proceso judicial sigue su curso y nosotros colaboraremos en todo lo que nos requieran».